Madre mía, cómo está nuestro Rob, por fuera y por dentro. En la primera escena está para comérselo y cuando habla me derrite, por su voz y por los comentarios tan inteligentes que salen de su boca. Sólo una pega al narrador: que nuestro chico es inglés, no norteamericano. Gracias, Nani. Ayy, si no fuera por ti, no me enteraría de nada.
Madre mía, cómo está nuestro Rob, por fuera y por dentro. En la primera escena está para comérselo y cuando habla me derrite, por su voz y por los comentarios tan inteligentes que salen de su boca.
ResponderEliminarSólo una pega al narrador: que nuestro chico es inglés, no norteamericano.
Gracias, Nani. Ayy, si no fuera por ti, no me enteraría de nada.