Robert Pattinson y LUNA NUEVA

Robert Pattinson está teniendo un momento Obi-Wan Kenobi. En un estudio de sonido, donde se rueda "Luna Nueva", de la saga "Crepúsculo", el larguirucho robacorazones inglés está de pie delante de una pantalla alta y ancha, murmurando una tierna amonestación, "Me prometiste no cometer ninguna imprudencia". Las cámaras le capturan a través de un camino fijado al suelo del escenario, mientras un equipo de técnicos estudia su postura y la inclinación de su cabeza.

El plan es insertar digitalmente a Rob, que interpreta al vampiro bueno Edward Cullen en una escena que se filmó mucho antes -en la que se aparece a su coprotagonista, Kristen Stewart, advirtiendo a su testarudo personaje Bella Swan que no pase el tiempo con motoristas desagradables. Para que este efecto funcione, se necesitará que la imagen de Pattinson se deje caer en la posición correcta, por lo tanto a pesar de estar casi en el fin de un día de principios de mayo, se exige la perfección.

El equipo que trabaja en esta secuela de Catherine Hardwicke, que dirigió "Crepúsculo", película que recaudó 365 millones de dólares para Summit Entertainment, se mueve rápidamente para mantener el momento de esta franquicia sexy y orientada a la juventud.

Entre tomas, Pattinson habla con el equipo de rodaje, mientras el director Chris Weitz está de pie un poco más lejos, con los brazos doblados detrás de su cabeza. Los efectos visuales "no es lo mío", concede con una sonrisa irónica.

Lo que a él le interesa es la literatura. "Luna Nueva", cuyo estreno se espera el 20 de noviembre en los cines, marcará su tercera adaptación literaria consecutiva, después de haber dirigido "About a Boy", basada en la novela de Nick Hornby, y "The Golden Compass",una película con un alto presupuesto, basada en el primer capítulo de la novela de Phillip Pullman "His Dark Materials", ganadora de premios. Fue una experiencia hacer esa película, que debería haber sido realmente un proyecto soñado, dada la reverencia de Weitz por el material fuente, que le dio la idea de tomar las riendas de la segunda película de la saga "Crepúsculo", tan atractiva.

Durante la postproducción de "Compass", unos asuntos relacionados con la historia acerca de la religión y de su final triste hicieron que el estudio New Line tomara el control de esta película de 180 millones de dólares.

La película ganó solamente 70 millones de dólares en el mercado nacional, aunque en el extranjero le fue mejor, y Weitz todavía se desespera por haber sido incapaz de reproducir fielmente la visión de Pullman (New Line declinó comentar esta historia).

"Es una de las cosas que me han producido más tristeza en mi vida, que no pude darle el giro de la forma que yo hubiera querido", dice.

"Luna Nueva", una historia acerca de supervivencia y pérdida, es la oportunidad de Weitz para curar las heridas y encontrar un nuevo camino creativo. Un camino que nos lleva a través de los sombríos bosques del noroeste del Pacífico y de la ciudad italiana de Montepulciano. Los últimos tres días del rodaje tendrán lugar allí, pero antes Weitz necesita completar las complicadas maniobras de cámara que permitirán que Edward Pattinson se convierta en una visión espectral.

Para cualquier persona que no esté familiarizada con el mundo de "Crepúsculo": En el primer libro de la saga de Stephenie Meyer, Bella Swan, de 17 años, se traslada a Forks, Washington, para vivir con su padre, sheriff de esa pequeña ciudad. Ella se enamora pronto del misterioso Edward Cullen, un vampiro que, al igual que el resto de su "familia", se abistiene de beber sangre humana. En "Luna Nueva", Edward opta dejar la ciudad para proteger a Bella -cuya proximidad a estas criaturas sobrenaturales y poderosas, la ponen en un peligro casi constante- pero esta decisión provoca que ella se quede con el corazón roto y sin consuelo.

El éxito de la película, que cuenta con el apoyo incondicional de las fans de Meyer, la mayoría de ellas adolescentes (pero que también incluye a chicos jóvenes y a madres), catapultó a Stewart, de 19 años y a Pattinson, de 23, a un nivel de estrellato que hace sentir a los dos actores incómodos. Su reticencia ante la fama es comprensible: La naturaleza de sus relaciones fuera de la pantalla se ha convertido en un tema frecuente de especulación en los tabloides.

Durante estos días han tenido que declinar bastantes entrevistas, rechazando amablemente contestar preguntas planteadas incluso por periodistas invitados a visitar el set. Taylor Lautner, de 17 años, que hace el papel de Jacob, amigo de Bella, no ha experimentado exactamente la misma clase de histeria, pero con el personaje que interpreta en "Luna Nueva", al frente de la acción, pronto la experimentará.

"No sé si te puedes acostumbrar a ello" dice Lautner, que tiene cara de niño, del ardor que inspira la serie. "Hemos visto la pasión y dedicación de sus fans". Es fantástico. Sin ellos no estaríamos aquí, pero están por todas partes.

"Siempre estás experimentando con los fans", añade Lautner, que pasó un año en el gimnasio, entrenando para las exigencias físicas de su papel en "Luna Nueva". "A veces es un poco insoportable"

Se han pasado muchas horas esperando a que el sol salga en Vancouver, donde casi siempre está nublado. Weitz y su equipo han estado intentando hacer una de las pocas secuencias exteriores que requieren una luz natural brillante, pero como el clima difícil ha rehusado cooperar, el equipo y el elenco de "Luna Nueva" están a punto de pasar la mejor parte de un día de 12 horas en un vestíbulo de ficción, de mármol italiano con columnas y grabaciones en latín.

Ahora, el consejo de vampiros en el poder están decidiendo el destino de Edward y Bella. Andando con su brazos extendidos, Aro, interpretado por el actor británico Michael Sheen, que lleva lentes de contacto rojas, ofrece un saludo vagamente siniestro a sus huéspedes. La escena se repite una y otra vez, con Pattinson dejando el set alguna vez para consultarle a Weitz alguna línea del diálogo.

De pie, al lado de los monitores, la pareja mira un serie de opciones, mientras Stewart se sienta en el suelo un poco aburrida mientras espera que las cámaras reanuden el rodaje. Después de varios minutos, Pattinson, que llevaba una toga larga roja y moratones pintados alrededor de los ojos, vuelve y el rodaje se reanuda.

"Les prometí a los actores que fuera lo que fuera, tendríamos tiempo para discutir cada línea" explica Weitz. "Había una línea que él pensó que era repetitiva, y Rob no sentía dónde estaba él en la escena. Lo trabajamos y surgió un diálogo alternativo. Que yo sea un director escritor, ayuda. No siento pánico cuando un actor no se siente a gusto con un diálogo".

"Después de esta película, Weitz dejará la saga "Crepúsculo"; el director David Slade, conocido por "Hard Candy" y "30 Days if Night" rodará la tercera parte de la franquicia, "La Saga Crepúsculo: Eclipse" que se estrenará el 30 de junio de 2010.

El productor Wyck Godfrey dice que cambiar a los directores mientras se mantienen los mismos actores y guionista, en este caso, Melissa Rosenberg, traerá una energía diferente a cada película de la saga "Crepúsculo" sin desbaratar la continuidad global. Weitz fue potenciado después de que Hardwicke decidiera no participar en "Luna Nueva", alegando problemas con los horarios, pero la selección de Slade provocó asombro. El argumento de la historia es el romance entre Edward y Bella después de todo, y Slade no se parece mucho a un romántico.

Godfrey señala que "Eclipse" es más oscura en tono que las historias que le preceden y que hay más acción, por lo que Slade es una buena elección.

Un gran interrogante se abre ante "Amanecer", la novela más adulta de la serie de Meyer. Godfrey sólo dice al respecto que toda la gente involucrada tiene la intención de hacer lo que será la cuarta película (La página web imdb.com nombra "Amanecer" como película en desarrollo con fecha posible de estreno en el 2011)

Estamos rodando "Luna Nueva", preparando "Eclipse", haciendo todo el marketing -es un poco agobiante pensar realmente de modo detallado cómo vamos a resolver esto, pero tenemos la intención", dijo acerca de "Amanecer".

Estamos en julio, y en unos pocos días, Weitz se enfrentará a más de 6000 fans chillonas cuando desvele material nunca visto antes de "Luna Nueva" en Comic-Con Internacional en San Diego. En la convención del año pasado, meses antes de que se estrenara "Crepúsculo", los chillidos de alegría eran casi ensordecedores.

Las dos secuencias que está preparando para el acontecimiento -una, una escena de acción que mostrará alguno de estos efectos, la otra, una escena de amor, que seguro que provocará histeria en la multitud- estarán preparadas a tiempo.

Con tantas cosas en juego en Comic-Con, donde el boca a boca puede a menudo hacer o romper un proyecto, Weitz se siente confiado en que la reacción sea positiva, especialmente si se considera que muchos miembros del elenco estarán allí.

"Es un sentimiento realmente extraño y maravilloso saber que la gente va a ver lo que tú estás haciendo", dice Weitz. "El miedo que te entra a veces cuando estás haciendo una película es que tú has conseguido que se vistan todos de etiqueta sin ningún lugar a donde ir. Ciertamente, cabe la posibilidad de que yo no cumpla con mi deber y que todo el mundo vaya a odiar la película y a mí por el trabajo que he hecho con ella. Pero al menos, la gente va a ir a verla.

Fuente

Tengo que darle las gracias a mi amiga "moon" ella es mi traductora particular.